Arriba, lugar del que hacemos parte, eso es al principio, y seguimos ahí, bueno, algunos, hoy estaba esperando una noticia buena y al contrario me defraudó, pasa con frecuancia, todo el tiempo, algunas veces no soy tan victorioso como quieros ser, uno pone todo su empeño en un proyecto, trabajo fuerte, soy constante, corro cuando hay que hacerlo, descanso poco, aprovecho mucho el tiempo, pregunto a diferentes personas, voy aquí o allá, me embarco en días interminables, la energía se agota, todo esto con el fín de lograr conseguir ese ideal, esa tan esperada respuesta, ese "si" brillante que pienso me abriría los ojos y la sonrisa de oreja a oreja, pero no llega, y es tan definitivo, nada puede cambiarlo, aunque así es todo, se toman desiciones y cuando uno se da cuenta de que está equivocado es imposible volver atrás, y en realidad, para que volver atrás, algunas veces las cosas salen tan bien, son como perfectas, como si cada vida fuera una canción, una sinfonía, hecha por Mozart o Beethoven, al que hace bien, le va bien, al que no, pues ya verá, se creará una sinfonía algo terrorífica, y yo no quiero eso, por eso estoy aquí, por eso empiezo a escribir con la imagen de ganar algo, de conseguir lo bueno, ganar lo bueno, eso quiero, por lo tanto cuando caigo, cuando me frustro, cuando me derrotan, cuando pierdo, pienso, que fácil es levantarse, que fácil es ver el cielo, tan fácil como ponerse otro reto, otra meta, porque se que después de la derrota, lo que me salva, para no entrar en pánico, es eso, buscar otro camino, olvidar y resistir, renovarse, ponerse un objetivo más agudo, más grave, más complejo, eso me va a fortalecer y me hará ganar algún día lo que quiero, ese tan anhelado premio que estoy buscando ahora, puede que no sea el próximo, pero se que cuando veo arriba hay esperanza y hacía allá quiero seguir viendo, para luego hablar solo de triunfos, los que veo cuando sigo viendo allí, arriba.
